Visita del refugio de animales

El pasado miércoles nos visitaron en clase tres amigas del Refugio de Animales de Logroño: Virginia, Carmen y su perrita Nina.
Algunos tenían un poco de miedo a Nina al principio, pero enseguida comprobamos que es muy tranquila y que le encanta la gente y, sobre todo, las caricias. Así que se llevó una buena ración: ¡todos querían tocarla!
Carmen nos contó que a Nina la encontraron un día abandonada con sus dos cachorros y la llevaron, como a muchos otros perros abandonados, al Refugio de Animales. Una familia adoptó a sus cachorros y Carmen, que es voluntaria del Refugio, la acogió a ella en su propia casa.
Pero otros animales no tienen tanta suerte. Cada año se abandonan unos tres mil perros sólo en La Rioja. Evidentemente, no todos pueden ser rescatados. Algunos tienen enfermedades o heridas graves y mueren. Y en el Refugio sólo caben 130.
Lo más importante que nos explicó Carmen es que UN ANIMAL NO ES UN JUGUETE. Si alguien quiere tener una mascota, es mejor adoptar a uno del Refugio que comprarlo. Y, sobre todo, hay que tener muy claro que, una vez en casa, necesitará cuidados, cariño y atención. No se le puede tratar como a un objeto y hacerle caso sólo cuando nos apetece. Así que, antes de decidirnos a tener un animal en casa, debemos estar seguros de que queremos y podemos atenderle como es debido. Y, desde luego, nunca, nunca abandonarlo.
Otra opción es la de apadrinar. Íñigo nos explicó cómo funciona porque él y su hermana son padrinos de una perrita del Refugio. Consiste en ayudar a su mantenimiento y en ir siempre que quieran a pasearla y a jugar, aunque después ella se queda en el Refugio. Así pueden darle cariños y disfrutar de ella aunque no la lleven a vivir a su casa.
Ha sido una experiencia muy interesante la de tener a Nina y a las chicas de la Asociación Protectora de Animales en clase. Hemos recibido una importante lección y hemos aprendido a ponernos un poco en la piel de nuestros amigos los animales.